9.26.2006

Maletin

El anciano se hace famoso por cargar el maletin en todo momento: al salir o llegar a su casa, en cada restaurante, al hacer sus compras, al pasear al perro. Sobretodo las leyendas urbanas se dan por la forma en que acude a las cantinas de la colonia cargando con aquel objeto. Nunca le pierde la vista, y si le es posible, lo pone en su regazo miéntras bebe a solas. Algunos piensan que lleva un objeto de gran valor, otros que es un demente. Cuando algún curioso intenta preguntar por el contenido recibe una rafaga de gritos e insultos.

Sobrepasado por la curiosidad, un joven se decide a robarlo. A la salida de una cantina sube al hombre a su auto, lo lleva a una casa solitaria. Alli le arrebata el maletin, al cual el viejo se aferra con todas sus fuerzas. ¡No, por favor!, le suplica desde el suelo, ¡No lo abra, no entiende! El chico lo mira con burla, quita el seguro, observa el interior: está vacio. ¡La dejó escapar, será el fin de todos! dice el anciano desecho en lágrimas. Guarda silencio repentino y se queda inmovil. Al revisarlo, él muchacho se da cuenta de que esta muerto. Tira el cuerpo a un barranco.

El joven pasa la noche en vela, viendo al malentin vacio. A partir de ese día lo carga en todo momento, sin abrirlo, esperando que aquello que escapó regrese.

1 comentario:

Raistlin dijo...

Me recordo la pelicula de Cronos